UN MINISTERIO DEL MEDIO AMBIENTE: ¿REFORMA DEL ESTADO EN EL TEMA AMBIENTAL?
Hace poco menos de un año la primera mandataria chilena Michael Bachelet, dentro de su denominado, Plan de los 100 días, decidió designar un Presidente para su Consejo Nacional del Medio Ambiente , otorgándole el rango de Ministro de Estado. Ello nos es más que una muestra evidente de la importancia que tiene la protección del medio ambiente en ese país, en contraste con la poca atención que ha tenido en el Perú en los últimos quince años, donde se ha avanzado bastante, pero donde se puede hacer mucho más.
En efecto, este hecho nos debe llevar a la reflexión en torno a la necesidad de establecer una reforma del Estado en esta área, que implicaría, en nuestra opinión, una de dos alternativas: 1.- la creación de un Ministerio ó un Viceministerio del Medio Ambiente, que requeriría, en principio, fusionar a nuestro Consejo Nacional del Medio Ambiente (Conam), con el Instituto Nacional de Recursos Naturales (Inrena) y otras entidades más; ó; 2.- Fortalecer al Conam y darle más facultades así como dotarle de más recursos para que cumpla sus funciones. No olvidemos además que la Ley General del Ambiente le ha dado más facultades al Conam, aunque con pocos recursos.
Esta nueva entidad estatal (el Ministerio o Viceministerio) o un Conam recargado apuntarían a crear sinergías en sectores claves del área ambiental que al mismo tiempo impacten positivamente en la economía nacional. Por otro lado, contribuirían a diseñar nuevas formas y espacios organizacionales que den respuestas eficaces tanto a los problemas ambientales que padecen los peruanos como a las limitaciones a nuestro desarrollo sostenible.
En el campo ambiental, una entidad con mayor fortaleza política (sea un Ministerio o Viceministerio o un Conam con mayores facultades) permitiría optimizar los esfuerzos no sólo de las instituciones estatales sino también los de las organizaciones representantes de la sociedad civil (Ong´s) y de las agencias de cooperación internacional que son los principales interlocutores del tema ambiental en países como el nuestro. Una autoridad ambiental fuerte también podría trabajar mejor en todos los temas propios del área, como son las cuencas, los suelos, el aire, el ruido, el manejo de residuos sólidos urbanos y rurales, la educación ambiental y seguir los avances de los convenios internacionales, con un enfoque menos disperso y más integrado.
Hay tres temas que habría que debatir si se crea un Ministerio Ambiental: ¿Crearía más burocracia, cuando de lo que se trata es de reducir el Estado?, creemos que no, porque estaría integrado por la fusión de varias entidades que ya existen y que hacen una buena labor, pero que podría ser mejorada si la hicieran en conjunto. ¿Este Ministerio o Viceministerio se ocuparía de los temas mineros?. Creemos que no debería. Los temas ambientales mineros deberían ser tratados por el Ministerio de Energía y Minas y por un ente regulador que a la fecha es el Osinergmin. ¿Dependería este viceministerio de la Presidencia del Consejo de Ministros?, pensamos que no. Después de casi 15 años de depender de la PCM, parecería que el tema ambiental ya tiene derecho a la mayoría de edad.
No hay que olvidar que el Perú es uno de los doce países con mayor megadiversidad del planeta y que es depositario de grandes riquezas naturales aún no bien estudiadas. Además es poseedor de conocimientos tradicionales y ancestrales que pueden redituar grandes beneficios para el país. En ese sentido, una entidad ambiental fuerte nos daría mayor presencia ante la comunidad internacional y sobre todo ante las agencias de cooperación internacional, especialmente ante las europeas, que han comenzado a disminuir la cooperación en los temas ambientales.
Un área en el que podría estar ubicado este Ministerio o Viceministerio podría ser junto a los temas de comercio exterior y turismo, con el ánimo de que se desarrollen dos ejes de gran importancia para la captación de la cooperación internacional y que otros países están aprovechando con gran éxito: el eje comercio-medio ambiente y el eje turismo-ecología.
En la actualidad, la buena gestión ambiental resulta una baza importante para el desarrollo, por cuanto atrae ingentes recursos financieros y tecnológicos al país por concepto de comercio y turismo de productos ecológicos. Que el nuevo Gobierno le dé la condición de un Ministerio o Viceministerio a este tema en nuestro país nos pondría a la par con otros países de la región como Colombia, Venezuela, Bolivia y Brasil que tienen Ministerios o Viceministerios de medio ambiente.
Igualmente, cabe señalar que existen experiencias interesantes que podría ensayar una autoridad ambiental más fuerte. Vamos a poner tres ejemplos. El primero es la propuesta de privatizar los parques naturales de nuestro país para obtener un mejor manejo de los recursos naturales y al mismo tiempo hacerlos más atractivos comercialmente (como se hace en la experiencia de Sudáfrica), así la empresa privatizadora podría crear paquetes de servicios turísticos, hospedaje, visitas guiadas, entre otros.
Una segunda propuesta, en un plano más social, sería estudiar la posibilidad de establecer una ecotasa o un ecoimpuesto, como se aplica en algunas autonomías de España, que permite recaudar un tributo para favorecer un área específica del medio ambiente. Es decir a manera de compensación, lo que se recaudaría de un sector se destinaría a un área medioambiental que requiere de especial cuidado. Pero esta propuesta habría que contrastarla con el sistema general de impuestos de nuestro país, que apuesta por un esquema de pocos impuestos.
Finalmente, en un mundo globalizado donde la energía, especialmente la generada por el petróleo, es la más importante, una autoridad ambiental fuerte podría ayudar en el uso y aplicación de combustibles nuevos, más limpios y menos contaminantes como el gas y el etanol. Sin ir muy lejos, Brasil es un país donde se ha aprovechado de manera inteligente y sostenible este último combustible, basado en el alcohol. A nuestro país le convendría diversificar su demanda de productos energéticos, en un escenario internacional en que los precios del petróleo tienden a subir.
En los tiempos del cambio climático, sería interesante reflexionar sobre estos temas tan importantes para nuestro país. El diario El Comercio en su editorial de este último domingo (10.06.07) ha hecho un llamado importante también en este sentido. Ojalá tengamos buenas noticias en el futuro próximo.
En efecto, este hecho nos debe llevar a la reflexión en torno a la necesidad de establecer una reforma del Estado en esta área, que implicaría, en nuestra opinión, una de dos alternativas: 1.- la creación de un Ministerio ó un Viceministerio del Medio Ambiente, que requeriría, en principio, fusionar a nuestro Consejo Nacional del Medio Ambiente (Conam), con el Instituto Nacional de Recursos Naturales (Inrena) y otras entidades más; ó; 2.- Fortalecer al Conam y darle más facultades así como dotarle de más recursos para que cumpla sus funciones. No olvidemos además que la Ley General del Ambiente le ha dado más facultades al Conam, aunque con pocos recursos.
Esta nueva entidad estatal (el Ministerio o Viceministerio) o un Conam recargado apuntarían a crear sinergías en sectores claves del área ambiental que al mismo tiempo impacten positivamente en la economía nacional. Por otro lado, contribuirían a diseñar nuevas formas y espacios organizacionales que den respuestas eficaces tanto a los problemas ambientales que padecen los peruanos como a las limitaciones a nuestro desarrollo sostenible.
En el campo ambiental, una entidad con mayor fortaleza política (sea un Ministerio o Viceministerio o un Conam con mayores facultades) permitiría optimizar los esfuerzos no sólo de las instituciones estatales sino también los de las organizaciones representantes de la sociedad civil (Ong´s) y de las agencias de cooperación internacional que son los principales interlocutores del tema ambiental en países como el nuestro. Una autoridad ambiental fuerte también podría trabajar mejor en todos los temas propios del área, como son las cuencas, los suelos, el aire, el ruido, el manejo de residuos sólidos urbanos y rurales, la educación ambiental y seguir los avances de los convenios internacionales, con un enfoque menos disperso y más integrado.
Hay tres temas que habría que debatir si se crea un Ministerio Ambiental: ¿Crearía más burocracia, cuando de lo que se trata es de reducir el Estado?, creemos que no, porque estaría integrado por la fusión de varias entidades que ya existen y que hacen una buena labor, pero que podría ser mejorada si la hicieran en conjunto. ¿Este Ministerio o Viceministerio se ocuparía de los temas mineros?. Creemos que no debería. Los temas ambientales mineros deberían ser tratados por el Ministerio de Energía y Minas y por un ente regulador que a la fecha es el Osinergmin. ¿Dependería este viceministerio de la Presidencia del Consejo de Ministros?, pensamos que no. Después de casi 15 años de depender de la PCM, parecería que el tema ambiental ya tiene derecho a la mayoría de edad.
No hay que olvidar que el Perú es uno de los doce países con mayor megadiversidad del planeta y que es depositario de grandes riquezas naturales aún no bien estudiadas. Además es poseedor de conocimientos tradicionales y ancestrales que pueden redituar grandes beneficios para el país. En ese sentido, una entidad ambiental fuerte nos daría mayor presencia ante la comunidad internacional y sobre todo ante las agencias de cooperación internacional, especialmente ante las europeas, que han comenzado a disminuir la cooperación en los temas ambientales.
Un área en el que podría estar ubicado este Ministerio o Viceministerio podría ser junto a los temas de comercio exterior y turismo, con el ánimo de que se desarrollen dos ejes de gran importancia para la captación de la cooperación internacional y que otros países están aprovechando con gran éxito: el eje comercio-medio ambiente y el eje turismo-ecología.
En la actualidad, la buena gestión ambiental resulta una baza importante para el desarrollo, por cuanto atrae ingentes recursos financieros y tecnológicos al país por concepto de comercio y turismo de productos ecológicos. Que el nuevo Gobierno le dé la condición de un Ministerio o Viceministerio a este tema en nuestro país nos pondría a la par con otros países de la región como Colombia, Venezuela, Bolivia y Brasil que tienen Ministerios o Viceministerios de medio ambiente.
Igualmente, cabe señalar que existen experiencias interesantes que podría ensayar una autoridad ambiental más fuerte. Vamos a poner tres ejemplos. El primero es la propuesta de privatizar los parques naturales de nuestro país para obtener un mejor manejo de los recursos naturales y al mismo tiempo hacerlos más atractivos comercialmente (como se hace en la experiencia de Sudáfrica), así la empresa privatizadora podría crear paquetes de servicios turísticos, hospedaje, visitas guiadas, entre otros.
Una segunda propuesta, en un plano más social, sería estudiar la posibilidad de establecer una ecotasa o un ecoimpuesto, como se aplica en algunas autonomías de España, que permite recaudar un tributo para favorecer un área específica del medio ambiente. Es decir a manera de compensación, lo que se recaudaría de un sector se destinaría a un área medioambiental que requiere de especial cuidado. Pero esta propuesta habría que contrastarla con el sistema general de impuestos de nuestro país, que apuesta por un esquema de pocos impuestos.
Finalmente, en un mundo globalizado donde la energía, especialmente la generada por el petróleo, es la más importante, una autoridad ambiental fuerte podría ayudar en el uso y aplicación de combustibles nuevos, más limpios y menos contaminantes como el gas y el etanol. Sin ir muy lejos, Brasil es un país donde se ha aprovechado de manera inteligente y sostenible este último combustible, basado en el alcohol. A nuestro país le convendría diversificar su demanda de productos energéticos, en un escenario internacional en que los precios del petróleo tienden a subir.
En los tiempos del cambio climático, sería interesante reflexionar sobre estos temas tan importantes para nuestro país. El diario El Comercio en su editorial de este último domingo (10.06.07) ha hecho un llamado importante también en este sentido. Ojalá tengamos buenas noticias en el futuro próximo.
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