ENERGIA, MEDIO AMBIENTE Y LOS BIOCOMBUSTIBLES
Una nueva ventana de oportunidades económicas se le ofrece a nuestro país gracias a los biocombustibles. Al parecer, hay interés en los países desarrollados (léase, los Estados Unidos y la Unión Europea) por nuevas formas de energía que los hagan menos dependientes del petróleo, en especial del que viene del Medio Oriente. Es allí donde los biocombustibles como el etanol y el biodiesel tienen gran relevancia. Por otro lado, el cumplimiento del Protocolo de Kioto sobre Cambio Climático también ha obligado a los países desarrollados (no a todos, por supuesto, porque hay varios que no lo han ratificado) a buscar energías más limpias y renovables. Sus corporaciones además así lo han comprendido.
Sobre este tema, quienes llevan la delantera en nuestra región, son los brasileños que ya cuentan desde hace varios años con plantas de producción de etanol basadas en la caña de azúcar. En nuestro país, desde el sector privado, se han comenzado a instalar las primeras plantas de etanol en el norte del país. Esa es una buena noticia que traerá riqueza y trabajo en esa región del Perú.
Como es obvio, para nuestro país, el tema es de trascendental importancia. No sólo porque nos pone en el carril de las buenas prácticas de protección ambiental sino porque, incluso estratégicamente, es clave diversificar nuestras fuentes de energía. Por supuesto a los biocombustibles, deberíamos añadir también la energía eólica, la solar (a través de paneles solares como ya se hace en varios países en desarrollo con singular éxito) y otras formas de energías limpias y renovables.
Una opinión más sobre este tema. Creo que no deberíamos olvidar lo que alguna vez me confió un brillante Ministro de Energía y Minas de nuestro país refiriéndose a lo que le habían sugerido los brasileños sobre este tema: "para producir etanol y reconvertir nuestra industria a los biocombustibles, se requiere bastante, bastante inversión y capitales".
Sobre este tema, quienes llevan la delantera en nuestra región, son los brasileños que ya cuentan desde hace varios años con plantas de producción de etanol basadas en la caña de azúcar. En nuestro país, desde el sector privado, se han comenzado a instalar las primeras plantas de etanol en el norte del país. Esa es una buena noticia que traerá riqueza y trabajo en esa región del Perú.
Como es obvio, para nuestro país, el tema es de trascendental importancia. No sólo porque nos pone en el carril de las buenas prácticas de protección ambiental sino porque, incluso estratégicamente, es clave diversificar nuestras fuentes de energía. Por supuesto a los biocombustibles, deberíamos añadir también la energía eólica, la solar (a través de paneles solares como ya se hace en varios países en desarrollo con singular éxito) y otras formas de energías limpias y renovables.
Una opinión más sobre este tema. Creo que no deberíamos olvidar lo que alguna vez me confió un brillante Ministro de Energía y Minas de nuestro país refiriéndose a lo que le habían sugerido los brasileños sobre este tema: "para producir etanol y reconvertir nuestra industria a los biocombustibles, se requiere bastante, bastante inversión y capitales".
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